"Elegante y casual, casi trendy, Mehldau se sentó al piano como a él le gusta, con una mezcla de familiaridad y esoterismo. Su acercamiento al teclado recuerda inevitablemente al de Keith Jarrett, abstraído, místico. No tan extravagante pero (aparentemente) sí muy concentrado."
"A piano solo, las composiciones de Mehldau suenan más auténticas que en algunas de sus grabaciones, más ceñidas, tal vez, a lo que el pianista quiere extraer de ellas. Así, sin ser un compositor particularmente dotado, Mehldau brilló en el concierto también como autor, ya que varios temas suyos estuvieron entre lo mejor del recital."
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"El resto, según los estándares del pianista: tremenda técnica, escalofriante independencia de manos, ostinatos incansables y desarrollos que alcanzaron momentos gloriosos y que, ocasionalmente, traspasaron los límites de lo razonable entrando en el terreno de lo exhibicionista y lo autoindulgente. Mehldau es muy bueno, y lo sabe. Para bien y para mal. No hay evolución en su música, pero sigue exprimiéndola todo lo que puede."
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1 comentario:
El otro día vimos en el Canal Mezzo un concierto de 2010 de Jazz en Viena y me pareció alucinante, sé que mucha gente lo oida, que dicen que es un fraude y que es muy comercial, que prometía mucho pero se quedó en nada y que las drogas están acabando con lo poco que tenía que aportar, no lo sé pero esta entrada tuya me hizo recordar ese concierto de Mezzo. No sé, hace muchos años que le sigo (le descubría con el volumen II y ese Young and Foolish precioso que tiene el disco) y me sigue gustando a veces no tanto como en aquel disco pero otras veces escucho esa versión de Riverman a piano solo del Live in Tokio y...
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